Como podéis ver soy un gusano de seda negro, diminuto y peludito, llevaba casi un año encerrado en mi huevo, desde que mi mamá, una lindísima mariposa blanca, me dejó pegado en el trozo de sábana en el que he pasado todo el invierno.

¡Llevo meses sin comer!

Tengo mucha hambre, mi primera comida es la cáscara de mi huevo, es muy rica y nutritiva, me la he tenido que comer para poder salir, aunque solo me he comido la del agujerito por donde he salido.

Ahora soy un gusanito de seda pequeñ@, estoy en mi primera edad y solo puedo comer las hojas tiernas de morera, las hojas del árbol de las moras,  pero cuando esté en mi cuarta edad, comeré todo tipo de hojas de morera, mi apetito será insaciable y llegaré a ser tan grande como tía Guselena, y es que, ¡ella ya está en la quinta edad! ha evolucionado cuatro veces, aquí la vemos, mirando la obra maestra de tío Gusiván, un cómodo capullo de seda blanco, que hacemos todos nosotros, los hacemos de diferentes tonos de amarillo, naranja y blancos, dentro de ellos realizamos una metamorfosis durante los 22 días de nuestra sexta edad, tras los que apareceremos como una
 ¡Mariposa!.

Después de 3 o 4 días (según la temperatura) los gusanos de seda realizamos nuestra primera muda, cambiamos nuestra piel por otra mayor y parte de nuestros órganos, entre ellos las mandíbulas.

Muda de la segunda a la tercera edad.
Para poder evolucionar a la siguiente edad los gusanos de seda tenemos que cambiar nuestra piel por otra mas grande y nuestros órganos. Esta animación está aumentada en un 25%.
Si pulsas sobre ella podrás ver este proceso con más detalle.

Animación

  Aquí me tenéis, un gusano de seda casi al final de mi tercera edad, como podéis ver, unos somos blanquitos y otros tenemos rayas grises, pero tod@s trabajaremos por igual a la hora de fabricar nuestras cómodas "casitas" de suave seda, y tod@s llegaremos a ser una linda mariposa.

Tercera muda, fase de preparación para el cambio a la cuarta edad.-Los Bombyx mori, permanecemos en esta postura durante las 24-30 Horas previas a la muda, en esta fase nos verás cuatro veces en nuestra vida como gusano de seda, aunque hacemos un par de mudas dentro del capullo (donde nos transformamos en crisálida), durante este estado no debemos ser molestados y mucho menos ser trasladados ya que antes de entrar en esta fase sujetamos firmemente nuestras patas para que nos resulte más sencilla esta difícil y peligrosa tarea.